Según la Organización Mundial de la Salud, cada día mueren en el mundo casi 830 mujeres por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el parto. Un dato que, aunque ha mejorado con el tiempo, se sigue considerando “inaceptablemente alto”. Entre 1990 y 2015, por ejemplo, la mortalidad materna mundial se redujo alrededor de un 40% y, entre 2016 y 2030, los Objetivos de Desarrollo Sostenible plantean reducir la mortalidad materna mundial a menos de 70 por 100.000 nacidos vivos. Se estima que la mayoría de las complicaciones que aparecen durante la gestación y el parto son prevenibles o tratables de manera clínica y mediante un seguimiento adecuado. Incluso algunas pueden estar presentes antes del embarazo y se agravan con la gestación, especialmente si no se ha prestado atención oportuna a las mismas o ni siquiera se han detectado.
La monitorización inalámbrica: ventajas para la madre, el bebé y el profesional clínico La monitorización fetal es una de las grandes herramientas que permiten conocer el estado del bebé y de la madre en tiempo real, antes y durante el parto. Sin embargo, en este proceso, los profesionales se enfrentaban tradicionalmente a dos retos que dificultaban la correcta obtención de los datos. En este sentido, los sistemas más novedosos incluyen ahora nuevas funcionalidades que permiten numerosas ventajas para los pacientes y los profesionales clínicos. Destacan las siguientes: Además, la inclusión de estos nuevos sistemas requiere de una inversión relativamente baja por parte del hospital al integrarse en la infraestructura existente del centro.
De esta manera, se identifican las frecuencias cardiacas fetal y materna, además de la actividad uterina de una manera segura y con una experiencia del paciente, mejorada. Es aplicable además a casos de mellizos o trillizos en los que es posible detectar la coincidencia de frecuencia cardíaca al comparar automáticamente el pulso materno y las múltiples frecuencias cardíacas fetales para asegurarse de que se mantiene la separación. Se trata de mejorar el seguimiento de un proceso vital en el que toda innovación debe ir destinada al aumento de la seguridad en la toma de decisiones y la experiencia de la madre y del bebé. Fuentes de referencia: Philips (2017), “Philips presenta un sistema de monitorización fetal en forma de parche que permite el parto respetado”. Centro de noticias Philips.