Las pilas secundarias, también conocidas como pilas recargables, deben cargarse antes de su uso.
Las pilas primarias no pueden recargarse de forma fiable, ya que las reacciones químicas no son fácilmente reversibles y es posible que los materiales activos no retornen a su forma original. Los fabricantes de pilas recomiendan no intentar recargar las pilas primarias.