La zona de la piel que estás tratando es demasiado oscura y el dispositivo evita que se emitan pulsos de luz para protegerte y que no te hagas daño. Esto también puede suceder si te has bronceado.
Es posible que el sistema Lumea no sea adecuado para tu tono de piel. Consulta la tabla de tonos de piel del manual de usuario, que también está disponible en línea, para averiguar si Lumea es la mejor opción para ti.