Para cualquier padre es enormemente gratificante ver lo rápido que crece su pequeño recién nacido. Empezar a variar la alimentación con la introducción de alimentos sólidos junto con la leche le aportará al bebé la energía y los nutrientes adicionales que necesita para seguir creciendo sano y feliz.
Normalmente, después del primer mes, los bebés ganan peso, con una media entre 500 g y 1 kg durante los primeros seis meses. La leche materna es el primer alimento ideal, pero a partir de entonces, es necesario combinar la leche con alimentos sólidos para ayudar a que el bebé crezca y siga ganando unos 500 g al mes.
Muchos bebés pueden esperar hasta aproximadamente los seis meses para empezar a tomar otros alimentos además de la leche y en esta edad aprenden las habilidades necesarias para comer alimentos sólidos muy rápidamente. Sin embargo, cada bebé tiene un ritmo de desarrollo distinto, por lo que tal vez el suyo ya esté preparado antes de los seis meses. Solo tiene que asegurarse de no dar al bebé ningún alimento que no sea leche antes de los cuatro meses, ya que sus riñones y sistema digestivo no se han desarrollado completamente.
Empezar a comer sólidos es una fase muy emocionante, ya que el bebé aprende a disfrutar de sabores nuevos y variados.
Si no está segura de cuándo puede empezar a introducir alimentos sólidos, pida ayuda a su comadrón o pediatra. También puede proporcionar al bebé su primera cuchara para que la sostenga y se acostumbre antes de tratar de alimentarlo.
Que se despierte por la noche no siempre significa que tenga hambre.
Si el bebé está empezando a despertarse durante la noche, cuando antes dormía del tirón, no necesariamente se trata de una indicación de que tiene hambre. Los bebés tienden a cambiar sus patrones de sueño en torno a esta edad. El sueño varía entre sueño profundo y sueño más ligero, con breves periodos de excitación en los que los bebés se despiertan y lloran para llamar la atención.
El equipo médico debe ser quien evalúe a los bebés prematuros antes de empezar a introducir alimentos sólidos. Entre cinco y ocho meses después de la fecha de nacimiento real es el mejor momento para empezar a dejar el pecho. No obstante, también es mejor esperar hasta tres meses después de la fecha estimada del parto para que se desarrolle su coordinación muscular. Puede que los bebés prematuros de esta edad no controlen lo suficientemente bien la cabeza, por lo que deberá asegurarse de que su hijo tiene la cabeza y el cuello bien apoyados cuando comience a darle alimentos sólidos.