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Pero con 24 millones de personas que sufren EPOC, no está solo con estos sentimientos y no hay nada de lo que avergonzarse.

 

Un problema es que la depresión puede afectar negativamente a la EPOC y empeorarla, según otro estudio de la revista CHEST, que demostró que la disnea, la menor tolerancia al ejercicio físico y la sensación de desesperación aumenta cuando los pacientes con EPOC sufren de depresión.

 

"Hemos encontrado una conexión antes desconocida entre el cerebro y la EPOC," afirma el investigador principal Dr. Abebaw Mengistu Yohannes, lector de la Manchester Metropolitan University, experto en EPOC y salud mental. "La salud mental puede tener repercusiones en otras partes del cuerpo, en este caso, exacerbando los efectos negativos de la EPOC y el pronóstico desfavorable de los resultados para la salud del paciente."

 

Esencialmente, los investigadores piensan que necesitamos tratar el cerebro para tratar los pulmones, y esto es algo que tanto el paciente de EPOC como el profesional de la salud deben saber, señala el estudio.

Tratamiento de la cabeza con los pulmones

 

La investigación estudió a 1589 pacientes durante tres años y descubrió que más de la mitad no experimentaba síntomas depresivos, mientras que casi una cuarta parte de los pacientes se clasificaron como deprimidos permanentemente y el 14% desarrollaron depresión durante su seguimiento de tres años.

 

Se pidió a los pacientes con EPOC que completaran una prueba de marcha de seis minutos y una escala de calidad de vida durante el estudio. Los pacientes con depresión obtuvieron un peor rendimiento en la tolerancia al ejercicio y una calidad de vida deteriorada en comparación con los pacientes con EPOC que no estaban deprimidos.

 

En el caso de los pacientes admitidos para el tratamiento con exacerbación a corto plazo de la EPOC, este debe ir acompañado de un examen de salud mental que será una parte importante del plan de tratamiento, las instrucciones de alta y la atención de seguimiento.

 

Los investigadores concluyeron que la depresión en la EPOC es crónica y no se trata adecuadamente. Conocer la conexión puede ayudarle a tratar ambos problemas.

La parte positiva

 

La buena noticia es que la depresión se puede controlar y tratar con éxito, lo que a su vez mejora la EPOC, pero es el paciente quien debe decir al profesional de la salud que se siente deprimido o tiene ansiedad.

 

Aprender a vivir con EPOC también puede ser beneficioso para ambas enfermedades, ya que entender lo que está sucediendo en los pulmones y aprender técnicas de respiración para manejarlo puede prevenir crisis y ayudar a mantener el control de la respiración.

 

Mantenerse activo también ayuda con la EPOC y la depresión. Practicar algún tipo de ejercicio dentro de sus posibilidades es bueno para la forma física, la fuerza, la flexibilidad y la mente. "Ciertamente, en la EPOC, el ejercicio es importante por muchas razones y se ha demostrado que mejora los resultados para el paciente. Por lo tanto, si cree que podría estar deprimido, no lo ignore, reciba tratamiento y trabaje para volver a una rutina de ejercicio regular. La evidencia sugiere que es la mejor manera de optimizar el tratamiento para la EPOC", afirma el Dr. Mark Aloia, psicólogo de salud y responsable global en Phillips Health Tech.

 

"La relación entre la depresión y el ejercicio físico no es en absoluto específica de la EPOC, pero destaca en la enfermedad. Muchos estudios indican que el ejercicio ayuda a la depresión, aunque no se debe pensar que es la cura", dice Aloia.

 

Un programa de rehabilitación pulmonar o un grupo de apoyo para la EPOC también pueden ayudar a aprender de expertos y de otros pacientes sobre cómo controlar mejor la enfermedad y prevenir la depresión o los episodios depresivos por empeoramiento de la EPOC.

 

La EPOC es una enfermedad compleja, pero trabajar de cerca con su profesional de atención médica y ser consciente de la conexión con la depresión puede hacerle ir un paso por delante.