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    Sensibilidad en los dientes: causas y cuidados para dientes sensibles

    Estás disfrutando de un delicioso helado, pero de repente sientes un dolor incómodo en los dientes. ¿Te suena familiar? Muchas personas tienen los dientes sensibles al frío, pero no solo el frío causa sensibilidad. Las comidas y bebidas calientes, dulces y ácidas también pueden ocasionar dolor a las personas con dientes sensibles. 


    De hecho, un estudio reciente reveló que entre 11 y 33 personas de cada 1002 sufren sensibilidad dental en algún momento, y los niños con dientes de leche suelen sufrir de dientes sensibles, ya que los dientes de leche son más susceptibles a las influencias externas.


    Si alguna vez has pensado «Ay, qué dolor, tengo sensibilidad en los dientes», no te preocupes, nosotros te ayudamos. En primer lugar, explicaremos las causas del dolor en los dientes sensibles:

     

    • Retracción de las encías
    • Técnica de cepillado dental incorrecta
    • Rechinar los dientes
    • Higiene bucal insuficiente


    Además, veremos los fundamentos de un buen cuidado bucal para ti y tus hijos, y cómo tratar la sensibilidad dental. Sigue leyendo para descubrir nuestra guía completa sobre la sensibilidad en los dientes y cómo aliviarla, incluyendo opciones de tratamiento para la sensibilidad dental útiles en la vida diaria.

    Causas comunes de la sensibilidad en los dientes

     

    Los dientes sensibles reaccionan con mayor intensidad al frío y a otras influencias externas. Suele manifestarse con un dolor repentino, similar a un rayo, que se extiende hacia la zona de la mandíbula. La sensibilidad dental puede tener diferentes causas y, dado que afecta entre el 11 % y el 33 % de las personas2, es importante conocer las causas de la sensibilidad en los dientes:

     

    • Retracción de las encías. Causada más comúnmente por enfermedades de las encías, pero también por un cepillado demasiado agresivo e incluso por factores genéticos3, la retracción de las encías no es algo que deba tomarse a la ligera o ignorarse. Cuando las encías se retraen y los cuellos de los dientes quedan expuestos, los estímulos como los cambios de temperatura son registrados más fácilmente por el «nervio» (pulpa). Esto es especialmente común si el esmalte protector también está dañado.

    • Erosión dental. Aunque el desgaste dental leve es algo que ocurre de forma natural con el paso del tiempo4, el desgaste de la superficie del diente, especialmente por un cepillado excesivo o una dieta deficiente, puede aumentar la probabilidad de sensibilidad dental. La reducción del esmalte, que deja el cuello del diente expuesto a daños y provoca caries y erosión dental, es una de las principales causas de la sensibilidad en los dientes.


    Consejo: Las visitas regulares al dentista son una parte importante de tu salud dental y bucal. Sin embargo, si crees que la sensibilidad dental se debe a una caries u otro daño, asegúrate de pedir una cita para que te revisen los dientes.

     

    • Periodontitis. La periodontitis es la inflamación del periodonto, que es la zona formada por las encías, la raíz dental, la membrana periodontal y el hueso maxilar. Esta inflamación está causada por la placa bacteriana. Tras la inflamación, las encías se retraen, dejando al descubierto los cuellos dentales sensibles. 

    Además de las razones mencionadas anteriormente, hay varios factores de riesgo que contribuyen a que los dientes se vuelvan más sensibles con el tiempo. Otras causas de la sensibilidad en los dientes son:

     

    • Utilizar una técnica de cepillado incorrecta. ¿Sabías que podrías estar favoreciendo la abrasión del esmalte? Tanto cepillarse los dientes horizontalmente, en lugar de hacerlo de arriba abajo, como ejercer demasiada presión sobre los dientes al cepillarlos, favorece la retracción de las encías y la abrasión del esmalte. 

    • Rechinar los dientes. Rechinar los dientes provoca la degradación del esmalte protector y deja al descubierto la dentina. Esto es especialmente común en los niños, ya que son más propensos a rechinar los dientes y, en consecuencia, a sufrir sensibilidad dental5.

    • Higiene bucal insuficiente. Si no te cuidas tus dientes y boca de forma regular y exhaustiva, corres el riesgo de padecer varias enfermedades, como periodontitis1 y caries6. A su vez, estas pueden aumentar el desarrollo de los dientes sensibles3.

    • Dieta inadecuada. Quizás no te des cuenta, pero tus hábitos alimenticios pueden tener un impacto duradero en tu salud dental, incluyendo la sensibilidad dental. Los alimentos y bebidas azucarados y ácidos pueden provocar la erosión dental, lo que a su vez causa sensibilidad dental al frío y al calor7.

    Una mujer cepillándose sus dientes blancos con un cepillo eléctrico Philips Sonicare Airfloss.

    Cómo aliviar la sensibilidad dental: tratamiento para la sensibilidad dental

     

    Tanto si tienes los dientes sensibles al frío pero no al calor, como si toda tu boca tiene los dientes sensibles al dolor, tenemos la solución. Lo más importante para tener unos dientes sanos y sin dolor es un cuidado bucal minucioso. Evita ese momento impactante en el que tus dientes reaccionan al frío o al calor externos con esta guía sobre cómo aliviar los dientes sensibles:

     

    • Cepíllate los dientes con regularidad. Cepíllate los dientes al menos dos veces al día durante un mínimo de dos minutos cada vez. Además, asegúrate de utilizar un buen cepillo de dientes y una pasta dentífrica adecuada. Evita los cepillos de dientes de cerdas duras y opta por una pasta dentífrica desensibilizante.


    Consejo: Invierte en un cepillo de dientes de buena calidad que te ayude a ti y a tu familia a sacar el máximo partido al cepillado diario. Este cepillo de dientes sónico, por ejemplo, elimina hasta diez veces más placa en las zonas de difícil acceso* y ayuda a limpiar los dientes en profundidad. El cabezal ultrasuave es especialmente adecuado para dientes sensibles al dolor. También puedes optar por los cabezales Philips Sonicare S Sensitive, diseñados específicamente para personas con sensibilidad dental elevada

     

    • Utiliza hilo dental. Aunque el uso del hilo dental no es tan esencial como el cepillado, puede ser muy beneficioso a la hora de limpiar los espacios interdentales. Utilizar hilo dental una vez al día puede ayudar a eliminar la placa y reducir el riesgo de erosión dental y sensibilidad8.

    • Utiliza un enjuague bucal. Igual que el hilo dental, no es una parte esencial de tu rutina. Sin embargo, añadir un enjuague bucal a tu higiene dental te ayudará a llegar a lugares a los que no puedes acceder con el cepillo de dientes y supone un buen complemento para tu cuidado bucal diario9.

    • Limpia tu lengua. Gran parte de las bacterias de la boca se encuentran en la capa que recubre la lengua. Por ello, es imprescindible limpiar la lengua con la misma regularidad que los dientes. Puedes hacerlo utilizando un raspador lingual especial10.

    Dientes sensibles: remedios caseros para prevenirlos

     

    Conocer las causas y saber qué ayuda a combatir la sensibilidad en los dientes es solo la mitad del camino. Otro paso importante es la prevención. La clave para prevenir la sensibilidad dental es fortalecer el esmalte dental. Si tus dientes son sensibles al frío o reaccionan al dolor con otros irritantes, puede ser un indicio de que tu esmalte se ha debilitado. Evítalo con los siguientes consejos para prevenir la sensibilidad dental: 

     

    • Si buscas remedios caseros para la sensibilidad dental, un cambio rápido en tu dieta podría ser la solución a tus dientes sensibles al frío o al dolor. Lleva una dieta rica en minerales, como productos lácteos, verduras, cereales de trigo y pescado, y evita los alimentos demasiado azucarados o ácidos, como las bebidas gaseosas, los postres y los condimentos con alto contenido en sodio.

    • No te cepilles los dientes inmediatamente después de consumir alimentos o bebidas ácidas. Esto puede ser más perjudicial que beneficioso, ya que puede dañar el esmalte de la superficie de los dientes. En su lugar, espera al menos media hora antes de cepillarte los dientes.

    • Aplicar menos presión al cepillarte los dientes es un remedio sencillo para los dientes sensibles. Cepillarse los dientes con demasiada agresividad puede erosionar y desgastar el esmalte de la superficie de los dientes. Una vez que el esmalte ha sufrido un daño significativo, no puede repararse por sí solo. Evitar este daño te ayudará a evitar la sensibilidad dental.

    • El remedio más obvio para los dientes sensibles es optar por productos especiales para el cuidado bucal. Busca productos que contengan flúor, ya que ayuda a fortalecer el esmalte11


    Así de fácil. Por muy común que sea la sensibilidad en los dientes, con estas sencillas medidas tú y tu familia podréis disfrutar de una buena salud dental en muy poco tiempo. Tanto si tienes sensibilidad al frío como al calor, puedes seguir nuestras soluciones para la sensibilidad dental y vivir sin dolor. 

     

    *Basado en dos ciclos de cepillado dental de dos minutos cada uno al día con el programa de limpieza. 

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    Ya sea un cepillo eléctrico, cabezales o soluciones para el cuidado interdental – Philips tiene todo lo que necesitas para una higiene bucal completa.

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